Son los primeros días de Luciana, Maia y Yenifer como cuidadoras en un hogar de ancianos. Como mujeres trans, es la primera vez que acceden a un empleo formal: hasta este momento sólo han ejercido la prostitución. Con el correr de los días y al compartir la vida en esos pasillos aislados del mundo, cuidadoras y residentes forjan vínculos cada vez más profundos. De a poco, ese lugar extraño deviene para ellas -también- un hogar.
Reparto Principal: Maia Antesana – Yenifer Franco Pereira – Luciana Méndez
Cuidadoras
(Argentina/Chile; 80 minutos; 2025)
Formato: Digital – Color – 1:85
Sonido: Dolby Digital
Idioma: Español
Calificación: SAM 13
Dirección y guion: Martina Matzkin – Gabriela Uassouf
Producción: Rocio Pichirili – Groncho Estudio
Co-Producción: Marianne Mayer-Beckh – El Otro Film
Dirección de Fotografía: Florencia Mamberti
Dirección de Arte: Valentina Encina – Edna Mostyszczer
Montaje: Coti Donoso – Valeria Racioppi
Dirección de Sonido: Emiliano Biaiñ – Marcos Zoppi
Música: Camila Moreno – Paz Kumelen Berti
Coordinación de Post Producción: Agostina Bryk
Palabras de las directoras
Historia del proyecto
Conocimos a varias mujeres trans que realizaban un curso de capacitación en cuidados para adultos mayores. La mayoría ejercía la prostitución y buscaban una alternativa para su futuro, para cuando el cuerpo ya no aguantara. Para ellas, pensar en la vejez era ejercer un derecho históricamente negado: la expectativa de vida de las personas trans en Argentina sigue siendo menor a los 40 años. ¿Cómo cuida a un anciano, alguien para quien la ancianidad es un privilegio?
Historia de la película
Nos vinculamos con esas mujeres trans, algunas ya trabajaban en un hogar público. Empezamos a filmarlas, pero llegó la pandemia. Lo que habíamos iniciado se discontinuó por completo. No pudimos entrar al Hogar por mucho tiempo. Algunxs residentes incluso fallecieron. ¿Cómo recomenzar? Con mucha voluntad, junto a Mocha Celis y otras instituciones, dimos inicio a un nuevo curso para cuidadoras trans. La necesidad de estabilidad y una proyección a futuro, post-pandemia, se volvió más fuerte que nunca y la convocatoria para el curso fue un éxito. Allí aparecieron nuestras nuevas cuidadoras.
Motivación
Como corolario del curso, las estudiantes realizaban pasantías en el Hogar Santa Ana. Empezamos a filmar a cuidadoras recién recibidas, desde su primer día como pasantes. Para ellas, al igual que para nosotras, el encuentro con el hogar no fue fácil. Significó mirar de cerca, escuchar y pensar en cosas que nos suelen angustiar. Pero con el tiempo, junto con las cuidadoras, empezamos a cambiar la mirada. Atestiguábamos vínculos de tal empatía, que esa relación cuidadora-cuidado se sentía como una amistad, o una familia elegida, algo de mucha complicidad, una ternura que merecía ser retratada.
Propuesta estética
Las filmamos a lo largo de un año, contando cómo crecieron en el oficio al lado de las personas entrañables que habitan el hogar. Los consejos eróticos que Maia recibe de Alicia (80); los puntos en común que Yeni encontró entre su juventud y la de Vicky (92); o la pasión por la aventura que comparten Luciana y Beto (85), que fue pistero toda la vida. En este sentido, el hogar, donde cuidadoras y residentes comparten, sueñan, se frustran, es un personaje más de la película. En el día a día de la residencia, lo más particular termina mostrándose universal. Elegimos retratarlo con la menor intervención posible del espacio, aprovechando siempre la luz natural, empleando la cámara fija para observar el encuentro y dejar que la magia ocurra.
Vínculo con la actualidad
Cuidadoras es un ejemplo de unas políticas públicas que funcionan muy bien y que hoy están amenazadas: la educación pública que formó a las cuidadoras; el cupo laboral trans que les dio la posibilidad de ejercer una profesión nueva y forjar un futuro posible; los fondos que financian al hogar, que prioriza a personas sin los medios económicos para acceder al sector privado. Los recortes brutales sobre las personas mayores crecen a la par de los discursos de odio frente a la diversidad. Esta película busca contraponer la empatía y el cuidado, al desdén que tiene el gobierno actual – y muchos otros en el mundo – sobre la vejez, la diversidad y lo público.
Sobre las directoras
Martina Matzkin es directora y guionista. Su último cortometraje El nombre del hijo (2020), fue estrenado en el Festival de Berlín, donde ganó el primer premio de la sección Generation Kplus. Luego recorrió 80 festivales, ganando otros 15 galardones, y estuvo en el catálogo de plataformas como HBO, Filmin y SRF. En televisión, fue coguionista de la serie Cosa de chicxs (2022) y una de las directoras de la serie documental TV contra las violencias (2023), premiada por el Ministerio de Cultura y estrenada en la TV Pública. Cuidadoras (2025) es su primer largometraje documental. En la actualidad trabaja en el documental Tristán y en su primer largometraje de ficción, Lo ideal, ganador del Concurso de Proyectos Inéditos del INCAA.
Gabriela Uassouf es guionista, realizadora y productora especializada en no ficción. Coordinó la producción de Terminal Norte (2021) y Camarera de piso (2022), ambos dirigidos por Lucrecia Martel, y forma parte del equipo de investigación de Chocobar, largometraje documental de la directora. Produjo la serie documental La mirada de Lestido, nominada a los premios Martín Fierro en Argentina. Cuidadoras (2025) es su primer largometraje documental como directora. En la actualidad trabaja en su siguiente documental Tristán.