Los vecinos de Palermo conocieron la nueva cúpula policial comunal y se reunieron en el Bar Overo del Barrio de Palermo. Allí, café mediante y medialunas, las autoridades fueron presentadas por la Señora Lucía Carew (Presidenta de la ONG «Vecinos junto a Policías»)
Presentes, en el lugar, estuvieron estas autoridades: Crio. Mayor Flavio Bouvet (Jefe de Área Norte IV, Comunas 12,13,14 y 15 ), Crio. Inspector César Adrián Marizza (Jefe C.C. 14) Crio. Matías Scartasini (C.V. 14 A), Crio. Maximiliano Alejandro Alvarado (C.V. 14 B), Scrio. Carlos Juarez( C.V. 14 C) y el Comunero Santiago Bermúdez (LLA)
Entre tantos temas tratados, los vecinos llevaron su preocupación ante la inseguridad que el barrio sufre. Tal es el caso de los trapitos, la avasallante cantidad de gente en situación de calle, los robos que se producen por escalamiento, otros a punta de cañón, o en diversas y en nuevas modalidades que se van perfeccionando día a día.
Una vecina anunció preocupación ante la ola reiterada de robos en una cuadra de la calle Soler, la cual se ha sucedido últimamente y en forma excesiva.
Otra señora puso de manifiesto la desigualdad que existe, entre el proceder policial y su esfuerzo, ante la indiferencia de la justicia por el «cajoneo» de las causas de los delincuentes: «Me desvalijaron la casa y todo quedó en la nada, y además sufrí otros hechos como robo de bronces en la entrada de mi hogar. A todo esto, la justicia no responde» Contó, a lo que el Crio. Mayor Flavio Bouvet dijo «En mi viaje de capacitación a Italia noté la diferencia de recursos humanos entre Roma y Buenos Aires. En esos países existe un reparto de actividades entre los tres poderes, Ejecutivo, Legislativo y Judicial, y este ultimo responde a la política criminal, entonces al Poder Ejecutivo no le cae toda la responsabilidad en sí. En cambio en la Argentina, en Buenos Aires, hay una diferencia con las leyes ambiguas que cuestan sacarlas o analizarlas. Por eso, también la Justica tiene menos herramientas de lo que establece la legislación».
Otra de las presentes expresó preocupación por la ola de trapitos que invade la zona de Cabrera y Lavalleja, en la esquina del restaurante «Alé Alé», quienes se apropian de la acera y ejercen una dictadura con los vecinos.
La Señora Lucía Carew también manifestó su preocupación al recordar que, algunas veces, existe complicidad entre los comerciantes de la zona al apañar a los trapitos. «Se han dado casos donde el dueño de un local le ha avisado a los trapitos que algunas denuncias estaban radicadas en la Comisaría, razón por la cual alertaban a los mismos ha migrar hacia otro lugar para que no se produzca su detención» Por otro lado, el Crio. Matías Scartasini también explicó que muchos vecinos los protegen al facilitarle sus propios coches para lavarlos. También les facilitan otros beneficios.
Otra habitante del barrio, expresó su intranquilidad pues puso de manifiesto la presencia de dos personas que habitan en la vereda de la calle Oro (Plaza Italia) quienes, comentó, son agresivas y amenazan a los vecinos de la región ya que se han adueñado de la zona. «Temo por hijos«, aseguró «A los cuales, muchas veces, debo acompañar para no dejarlos solos pues se sienten amenazados».
Un vecino explicó que existe gente que viene de otras comunas y se apropia de Palermo como si fuera su propia casa tomando veredas y calles para su hábitat común. Además expresó preocupación por los traslados que se producen espontáneamente: «Eso no es productivo para el vecino y más cuando uno ve que la autoridad policial cumple muy bien con su deber». Expresó
Por otro lado, otra palermitana manifestó que sería importante resurja la presencia policial de efectivos caminando por las calles, más allá de aquellos que manejan sus clásicos móviles. «La presencia policial a pie es importante para darle presencia policial en el barrio» Aseveró.
Asimismo, otra vecina explicó que, en la zona del Botánico, se acerca gente de la zona de Villa Devoto y otros barrios, que hace posesión de las calles y, en nombre de un hecho solidario, manifiestan que se acercan a donar objetos y comida y, de ese modo, hacen usurpación del espacio público: «Mientras tanto no se les puede decir nada porque ellos argumentan que es espacio público y todos tenemos derechos sobre él». explicó.
Para finalizar, las nuevas autoridades policiales fueron presentadas, al igual que las inquietudes de los vecinos presentes. Por lo cual, la policía, tomó nota sobre tales detalles, para proceder con su trabajo.