Redes sociales, las más elegidas por los universitarios. Según un relevamiento de la Universidad Nacional de La Matanza, tanto Facebook como Twitter son las plataformas sociales más elegidas para intervenir en las programaciones radiofónicas. Los resultados se desprenden de una investigación realizada por un docente de la Universidad.
Guillermo Meliseo (Agencia CTyS-UNLaM) – Mark Zuckerberg y los fundadores de Twitter nunca se lo hubieran imaginado: las redes sociales que ellos crearon en el 2006, hoy se convirtieron en una de las plataformas de comunidad virtual más utilizadas y consultadas por los usuarios de Internet. No solo por su practicidad a la hora de comunicarse en 140 caracteres, sino también por su capacidad de almacenar videos, fotos, comprar productos y hasta intervenir en las producciones periodísticas de los medios convencionales.
Y no es para menos. Justamente, un estudio realizado por la Universidad Nacional de La Matanza arrojó que los estudiantes de la carrera de Comunicación Social utilizan Facebook y Twitter para interactuar con la programación de las radios, tanto AM como FM. El autor del proyecto es el docente e investigador de la Casa, el Lic. Federico Ravera, quien desde el año 2009 es profesor de la cátedra Lenguaje radiofónico.
“El proyecto trata de analizar si existen modificaciones y hábitos en la manera de escuchar radio, y la forma que tienen los estudiantes de vincularse con ella. Al mismo tiempo el trabajo busca observar si las emisoras modifican sus contenidos a raíz de las conductas de sus usuarios, porque la realidad nos marca una diferencia entre la radio del 2009 y la del 2016”, detalla el docente a la Agencia CTyS-UNLaM.
Los resultados arrojaron que más del 60 por ciento de los encuestados utilizan Twitter para relacionarse con la radio, es decir, participar de la consigna del día, pedir un tema de música o interactuar con los locutores. También, un 48 por ciento de los oyentes utilizan Facebook para comentar, linkear o recomendar links. En el tercer lugar quedó el poco usado mensaje de texto, con un 29 por ciento y, en el cuarto lugar, la llamada telefónica con el 19 por ciento.
“Si uno compara estos resultados con el paso de los años se observa que en el 2009 más del 60 por ciento de los oyentes no sabía lo que era Twitter, mientras que el 25 por ciento sí. Entonces, no había mucho vínculo con la radio porque los estudiantes de comunicación ni sabían de que se trataba esta página”, confiesa Ravera. Y agrega: “Sin embargo, ahora el 82 por ciento tiene Twitter, lo conoce y lo usa de forma asidua”.
Cambio de hábito
Con el paso de los años, los dispositivos de escucha y la forma de percibir la música fueron variando. Según el estudio de Ravera, en el 2009, el principal dispositivo para escuchar la radio era la radio portátil, sin embargo, en el 2016 el más usado, el preferido y elegido es el celular.
“Esto se debe a que los estudiantes consideran que el mejor dispositivo para escuchar la radio es la radio misma, porque no tiene interferencia, el sonido es más claro, tiene mayor potencia, alcance, etc. Pero utilizan el celular por una cuestión de comodidad, utilidad y practicidad”, agrega el investigador.
Así mismo, la encuesta contó con preguntas de control y categorías que se fueron agregando de acuerdo con las respuestas de los participantes. “Hoy en día, la 
radio incorpora mensajes de wathsapp, una aplicación que en el 2009 no existía, por ello, para el bloque de la tercer muestra, me vi obligado a incorporarla porque los encuestados lo exigían en sus respuestas”, aclara.
La muestra tuvo un piso de 750 alumnos, mezclados entre la Universidad Nacional de La Matanza y la Universidad Católica Argentina, donde Ravera también es docente y da cátedra de comunicación y medios.
La primera parte de la investigación (2009-2010) estuvo financiada por el Programa de Incentivos a Docentes Investigadores Secretaría de Políticas Universitarias (PROINCE) dependiente del Ministerio de Educación. La segunda (2012-2013) y tercera parte (2014-2015) fueron realizadas por Ravera como proyecto para su maestría sobre Comunicación, Cultura y Discursos Mediáticos que dicta la UNLaM como estudio de posgrado.
