Por Ana Leguísamo Rameau. Los precios aumentan y los comerciantes hacen la guardia todos los días visualizando las reacciones de los que pasan y no compran. «Este tiene cara de invertir», piensan algunos vendedores mientras los turistas dan la media vuelta y se retiran. «Este me va hacer perder tiempo porque pregunta mucho y no tiene cara de tener dinero», dice otro feriante. «A aquel otro, ya lo conozco siempre viene, mira y toca todo pero no lleva nada».
Son todas expresiones que denotan incertidumbre y preocupación cuando la inflación baja, según en INDEC, pero los bolsillos yacen vacíos.
Por eso, y para sacarnos la duda, Foro de Baires habló con comerciantes de la zona de Palermo y rescató algunos testimonios preocupantes. Fuimos hasta un local sobre la rotonda de Placita Julio Cortázar. Le preguntamos a un feriante cómo ve el movimiento de los turistas: «No hay nada bueno que nos beneficie porque, últimamente, los turistas están viniendo muy poco a Buenos Aires. Los turistas no son tontos, porque se ha corrido la bolilla en el mundo que este país es muy caro y el dólar ya no les conviene».
Los bares se muestran bastante vacíos y sólo tienen éxitos aquellos que ofrecen buenas promos «Intentamos seducir a la gente con buenas propuestas y combos, pero es complicado porque los alquileres de los locales en este barrio son muy caros, por lo cual las promos que ofrecemos deben ser bastante medidas», dice el propietario de uno de los bares sobre la calle El Salvador.
No obstante, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó que la inflación de Octubre de 2024 fue del 2,7%, mostrando una desaceleración respecto al 3,5% registrado en septiembre.
De esta forma continúa la tendencia a la desaceleración de los precios que se viene observando en los últimos meses. El dato de Octubre es el más bajo registrado desde noviembre de 2021, cuando la inflación había llegado al 2,5%.
Por otro lado, Dante Camaño, secretario general de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA) seccional CABA, indicó que la baja acumulada en la gastronomía oscila entre un 7% y 20%.
De este modo, la situación del dólar y su impacto en el turismo extranjero es otro factor clave para entender la caída en la actividad de los restaurantes. Según datos del INDEC, la cantidad de turistas que visitaron Argentina en septiembre fue un 15,9% menor que en el mismo mes de 2023, lo que refleja una tendencia negativa que se viene repitiendo en los últimos meses. En comparación con 2023, la caída acumulada en la llegada de turistas al país asciende a un 4,3%. Y si se incluyen a los excursionistas, es decir, los que visitan el país pero no pernoctan, la caída es aún mayor, alcanzando un 27,9%.
Aunque la actividad baja en el sector, según el portal Grupo La Provincia los costos de los restaurantes siguen aumentando, lo que complica aún más la recuperación. Según el INDEC, el sector “Restaurantes y Hoteles” registró un aumento de precios del 4,3% en septiembre, por encima del IPC general de 2,7%. Este incremento de precios no tiene que ver únicamente con la inflación, sino con los altos costos fijos que enfrentan los empresarios gastronómicos. “El principal problema no es solo la caída de ventas, sino el aumento de los costos fijos: insumos, alquileres y tarifas”, explicó Olivares.
Por el contrario, aquella historia mostrando a Palermo como la gran vidriera del mundo, ha quedado en el pasado, con turistas ausentes y habitantes argentinos que luchan por sobrevivir a la terrible catástrofe de los aumentos y los cambios económicos que se deben afrontar.
Sin embargo, expresan los más positivos, no se puede refutar que, al menos por ahora, Milei está cumpliendo con su promesa de sanear la macroeconomía, bajar la inflación y estabilizar el dólar. Un dato no menos negativo a la hora de proyectar los negocios.
Para cerrar, más allá de estadísticas que marcan, a veces un aumento y otras un descenso, la verdad se visualiza en las mesas de los bares y restaurantes, los cuales muestran bancos vacíos o, alternadamente, baches de turistas nacionales e internacionales consumistas que ya no son la postal más numerosa de la inversión.