Al ver el almanaque y apreciar los días cálidos se destaca la mejor estación el año para la mayoría de las personas al despojarse de las prendas que el invierno, muy sutilmente, nos obliga a usar . Con una sonrisa de felicidad el ser humano podrá decir: «Al fin llegó la primavera!» Todo se vislumbra de una manera diferente, al guardar por algunos meses, que realmente parecen escasos, las aptitudes del
invierno, y es como si todo fuera pasado. Amanece y todo ese resplandor favorece para realizar cosas que estaban estancadas, y que ya es hora de realizar. Utilizar las horas del día en toda su magnitud para el disfrute de cada uno es muy importante. Por ello, uno desea cantar, pasear, renovarse. Esa es la palabra: renovación.
Primavera proviene del latín vulgar: Prima: primero- Ver: Veris. El latín viene del indoeuropeo: Ver relacionado al crecimiento y donde bien las palabras. Verde: verano- Vergel (huerto con variedad de flores y árboles frutales.)
La palabra primavera es la entidad del verano (ver primun) previa del verano, que significa la edad primera y prima. Según Virgilio Marón (70 A. C) Poeta latino le canta al trabajo del campo: La Eneida, narra la epopeya del pueblo romano. Qué está en la flor de la edad, es decir, que significa primavera de la vida. Para acercarnos a nuestra época el poeta catalán Rafael Santos Torroello, la describe como “La sonrisa del Señor” por ser época tierna, alegre, feliz con las flores y el cantar de los pájaros”. Y alguien que sabía de la vida como el escritor Jorge Luis Borges escribió: “Si pudiera volver a vivir, comenzaría andar descalzo a principios de la primavera y
seguiría así hasta concluir el otoño, andaría más vueltas en calesita, contemplaría más amaneceres y jugaría más con los niños. Ya no tengo primavera. Este es un párrafo del último poema que escribió Don Jorge Luis Borges.
En un cuento dramático de Roberto Arlt, uno de sus personajes lleva el nombre de Ester Primavera, entonces los jóvenes de la porteña Ciudad de Buenos Aires, saldrán a disfrutar de su libertad, por qué también es el Día del Estudiante, que como la palabra lo expresa pasearan por sus plazas, en absoluto respeto por ellas, donde serán la alegría de quienes los vean disfrutar su día. Sin necesidad de hacer estragos o desmanes, ya que el verdadero significado de la nueva estación del año no condice con ciertas demostraciones desprolijas sin atentar a los bienes que son de todos los citadinos y del patrimonio de cada uno de nosotros.
Algunos pasearan, otros irán a ver vidrieras, y todo Foro de Baires la recibirá con el Premio “Estímulo a la Calidad Editorial de los Medios Barriales de la Ciudad de Buenos Aires”.
Feliz Día de la Primavera para disfrute de sus anhelos!
Primavera en el Jardin Japonés
Azucena Cerundolo














