Así es, la crisis llegó a la plaza del barrio y alcanzó a los perros vecinos. De este modo, se ve en esta maquinita expendedora de bolsitas la ausencia de las mismas , donde siempre era usual extraer el material para limpiar el excremento de las mascotas.
Hoy, a través de un cartel escrito a mano, los vecinos se juntan en el barrio y escriben: «Bolsas para la caca». Allí, uno debe colaborar dejando una bolsita para que los habitantes del lugar se sirvan porque, evidentemente, el nuevo material descartable no se ha repuesto.
Por ello decimos que la crisis arrasa con todo y no respeta a nadie.
Esta es la imagen que se puede visualizar en Plaza Unidad Latinoamericana, en Costa Rica y Acuña de Figueroa. (Palermo)
También los perritos sufren las consecuencias de la economía desplomada actual. Suerte que existe la creatividad de los vecinos de la zona para que los espacios verdes sigan funcionando como Dios manda.
Son imágenes de la Ciudad.