Se presentaron las nuevas autoridades policiales en la Comuna 14. El evento se realizó en el Restaurante Overo, ubicado frente a Plaza «Inmigrantes de Armenia».
Presentes allí, estuvieron la Comisario Mayor Vanessa Etchezuri, Comisario Inspector Gregorio Alonso, Comisario de la 14 A Rubén Clavera, Comisario de la 14 B Sebastián Luján, Comisario de la 14 C Maximiliano Alvarado y el Subcomisario de Brigada Christian Altamirano. Por otro lado, también participaron de dicho encuentro, referentes de grupos de Prevención tales como Liliana Bouzo de «Vecinos en Red»y Lucía Carew, directora de «Vecinos junto a Policías» quien, además, ofició de moderadora en esta reunión. Por supuesto, no faltaron vecinos de la Comuna 14, quienes expusieron sus inquietudes.
En dicho encuentro, los vecinos hicieron hincapié, sobre todo, en el tema de la inseguridad del barrio.
Al comienzo, la Sra. Comisario Mayor Vanessa Etchezuri, a cargo de todas las Comisarías del Área Norte y con beneplácito de ser Policía Mujer, dio la apertura a dicha reunión. Posteriormente, Lucía Carew, comenzó con las presentaciones y reconoció la tarea de Maximiliano Alvarado de la 14 C que por su excelente trabajo del 2022, fue el ganador de la Copa Comunidad. Además, por mérito propio, tuvo la dicha de continuar con su cargo en la 14 C.
«Si bien los delincuentes llegan desde cualquier latitud, el groso del número, proviene del Conurbano Bonaerense, quienes viajan en tren hacia la Capital. El lugar elegido para delinquir es Palermo», expresó un policía.
Algunos vecinos argumentaron su problemática cuando expresaron vivir en el Pasaje Masón y saber que, frente a su casa, el dueño de un restaurante chino tira la basura creando suciedad y contaminación. «Los desperdicios de pescado y carne en mal estado son una constante del día a día», dijo una señora. Por ello, estos vecinos, intentaron hablar con el dueño pero sólo recibieron agravios constantes. No obstante también deben lidiar con la presencia de indigentes, los cuales se han afincado en el Pasaje creando molestias en el lugar.
Otra vecina, dueña de un hotel ubicado en la calle Baez al 200, comentó que los bares linderos, los cuales muchos han surgido en pandemia, toman el espacio público de forma indiscriminada. Además, se quejó por los deliverys que estacionan sus motos y ocupan la vereda. Sin embargo, dijo que se adueñan del lugar ubicando todo tipo de obstáculos y pertenencias. Por ello, es importante destacar que, muchos de los motociclistas que estacionan en el lugar, vienen del supermercado de enfrente, local que deja al libre albedrío que un sinnúmero de conos de transito se coloquen allí. Por todo este desorden, su hotel se ve perjudicado ya que, los turistas que llegan, deben sortear todo este caos de desprolijidades. Más aún, la propietaria de este hotel expresó que, muchos motoqueros y gente desconocida, suelen hacer ruedas de mates en su vereda. Situación por la cual, ella se ve afectada ya que su local es de nivel y, más allá de su condición, se siente invadida en su propio espacio por gente extraña.
«Los vendedores de medias son uno de los grandes problemas del barrio porque, camuflados en su trabajo, se arriesgan a delinquir», comentó otro policía.
Siguiente vecino habló que vive en el Pasaje Soria, entre Thames y Uriarte. De este modo, conversó sobre los delincuentes violentos que se han afincado en su vecindario. Detalló los delitos entre trapitos y otros ladrones donde evidenció un panorama, mediante el cual, se drogan, tienen sexo, y motorizan robos: «El Pasaje es un puente para robar en los puntos aledaños«, expresó.
Un vecino próximo comentó que siempre, que llamó al 911, recibió una respuesta muy positiva por parte de la policía. Situación por la cual se siente muy conforme. Dueño de un comercio en Palermo, sobre la calle Thames, se ve perjudicado por los delincuentes, quienes camuflados de vendedores, roban en toda la zona. Además relató dos anécdotas donde pudo visualizar dos robos y de los cuales participó como defensor de las víctimas logrando recuperar celulares robados.
«En breve se regularizará las situación de los trapitos, uno de los mayores flagelos de los vecinos de Palermo porque, no sólo molestan al prójimo, sino que también sacan ventaja y roban.», concluyó otro de los policías presentes.
De este modo, y en resumen, la reunión realizada en Overo fue fructífera pues no sólo sirvió para presentar en sociedad a las nuevas autoridades policiales sino también para dar lugar a los vecinos que no se sienten escuchados.