Es posible, cuando lean este artículo, piensen que nada se puede comer pues todo hace mal. Claro, los productos ingeridos en demasía nos perjudican. Por eso, hay que prestar atención y cuidado en la diversidad que la naturaleza y los productos maliciosos se nos ofrecen
Vayamos hacia diversos ejemplos
Carne
Probablemente has escuchado que la carne es parte de una dieta saludable y balanceada. Sin embargo, el consumo desmedido de este producto también es un riesgo para la salud. Mucha carne contiene pesticidas que son consumidos por los animales, y, a través de ellos, por los humanos.
La mayoría de la carne roja también contiene hormonas y antibióticos que se le dan a los animales para acelerar su crecimiento. El pescado, por su parte, puede contener metales pesados como el mercurio.
Jugo de frutas embotellado
Aunque este producto parezca estar hecho a base de frutas, el jugo de frutas embotellado contiene muchos ingredientes artificiales. Entre ellos está el sorbato de potasio, un conservador que puede ser dañino para la salud y causar irritación en la piel y los ojos.
Por si fuera poco, cada botella de 600 mililitros de este jugo contiene más del doble del valor diario recomendado de azúcar. ¡Esto equivale a 12 cucharadas de azúcar por botella!
Café
El café es indudablemente una de las bebidas que más se consumen en todo el mundo. Pero si bien puede darte energía para empezar el día, su consumo desmedido también puede significar daños para tu salud.
El exceso en el consumo del café puede traer problemas como trastornos del sueño o dolores de cabeza. Esta bebida también puede fácilmente empeorar problemas de ansiedad, y, a largo plazo, puede incluso ocasionar problemas cardiovasculares.
Refrescos de cola
Mucho se ha hablado de todo lo dañino que puede ser el refresco de cola para nuestra salud. Pero, ¿sabes exactamente por qué? Cada lata de 200 mililitros contiene 7.4 cucharadas de azúcar, que representan más del 100% del valor diario recomendado.
Este refresco también tiene ingredientes que pueden llegar a ser dañinos para los huesos, como el ácido fosfórico. Por último, el colorante que se usa en su elaboración contiene amonios y sulfuros que pueden llegar a causar cáncer.
Sopas instantáneas
La sopa instantánea es una comida muy popular por su precio accesible, y por lo fácil que es de preparar. Sin embargo, debido a sus bajos contenidos de fibra, una porción de esta sopa difícilmente te va a dejar satisfecho.
Además, la sopa instantánea es muy alta en sodio: cada envase proporciona la mitad del valor diario recomendado. Consumir este producto frecuentemente puede causar problemas como presión arterial alta, entre otros.
Salsa picante
No cabe duda de que este tipo de salsa picante es una de las más populares que existen. Por su sabor versátil, puede usarse en una infinidad de platillos, desde botanas sencillas hasta comidas más elaboradas.
Pero aunque el picor de esta salsa sea lo más atractivo, también puede dañar nuestro estómago y ocasionar gastritis. Lo más sensato quizás sea consumir este producto con moderación, y tomando en cuenta los efectos que puede tener en nuestra salud.
Pan blanco en rebanadas
El pan blanco en rebanadas es esencial para hacer almuerzos prácticos para llevar a la escuela y la oficina. Pero una de las razones por las que este producto se consume con tanta frecuencia, es que puede llegar a ser adictivo.
Esto se debe a que contiene azúcar, que ayuda en el proceso de fermentación del pan. Además, el pan blanco en rebanadas tiene grasa y sal que, en exceso, pueden perjudicar la salud, pero no tiene mucha fibra, o sea que difícilmente te dará saciedad.
Chicle
Muchas marcas de chicle se promocionan haciendo gala de sus supuestos beneficios. Algunas prometen un aliento fresco, e incluso dientes más blancos y limpios. Sin embargo, hay varios problemas bucales que se asocian al consumo de este producto.
Algunos chicles pueden llegar a ocasionar problemas como dolor estomacal, diarrea y dolor en la mandíbula. Aparte de eso, también se han llegado a reportar casos de niños que han sufrido asfixia tras hacer un mal uso de los chicles.
Cereal de arroz inflado cubierto de chocolate
El cereal de arroz inflado suele anunciarse como una gran opción para que los más pequeños desayunen. Lo que no se anuncia, por supuesto, es que son uno de los cereales más dañinos en el mercado.
Pochoclo (Palomitas de maíz)
Las palomitas de maíz naturales pueden ser una botana rica y saludable. Tristemente, las que se venden ya hechas en el supermercado son casi lo opuesto. Las palomitas de caramelo pueden llegar a ser increíblemente altas en azúcar y grasas.
Una bolsa de tan solo 20 gramos de palomitas de caramelo puede contener 12.8 cucharadas de azúcar y hasta 564 calorías. No hay duda de que preparar esta botana en casa es mucho mejor opción que comprarla.
Queso de untar
El queso para untar es tan versátil que puede prepararse en una infinidad de platillos, desde ensaladas, hasta postres. Pero aunque este producto tenga la apariencia de ser ligero y saludable, esto no es del todo cierto.
De los ingredientes que contiene, apenas un par de ellos son de origen natural. Los demás son conservadores y estabilizadores. Este producto, además, es alto en grasas saturadas, que se han asociado a diversos problemas de salud incluyendo cáncer y aterosclerosis.
Yogurt
Los yogures pueden ser un alimento ligero y saludable, pero hay que saber elegirlos. Muchos de los yogures que se venden comúnmente en las tiendas y supermercados, se promocionan como alimentos “de dieta”, cuando en realidad están repletos de azúcares y colorantes artificiales.
Al igual que con muchos otros alimentos, la mejor idea es optar por el producto que tenga menos ingredientes en su etiqueta. Mientras menos ingredientes contengan, y más naturales sean, los yogures serán más saludables.
Mix de papas fritas sabor queso
El mix de papas fritas sabor queso ofrece todas tus botanas favoritas en una sola bolsa. Pero cuidado: los distintos tipos de frituras incluyen también una bomba de colorantes y conservadores que podrían dañar tu salud si se consumen en exceso.
Todas las botanas incluidas en este paquete son altas en calorías, sodio y grasas saturadas. Esto puede causar una variedad de problemas para la salud, desde sobrepeso hasta condiciones más graves como alteración de la vista.
Salchichas
Las salchichas son alimentos sumamente procesados que contienen muchos ingredientes aparte de carne de animal. Entre ellos está la maltodextrina, que si se consume en exceso puede provocar daños en el intestino.
Además, una porción de salchichas tiene el 33% del consumo diario recomendado de sodio. Por si fuera poco, las salchichas suelen listar entre sus ingredientes la “carne de ave”, un término ambiguo que provoca dudas sobre la verdadera procedencia de la carne que contienen.
Tomates
Los tomates pueden contener muchos pesticidas, y su piel es tan delgada que a veces lavarlos y pelarlos puede no ser suficiente para deshacerse de los químicos. Por eso, si se tiene la opción, siempre es mejor comprar tomates orgánicos.
Pero los pesticidas no son el único problema. Los tomates pueden llegar a ser dañinos para personas que tienen problemas en el sistema digestivo, ya que contienen grandes cantidades de ácidos orgánicos.
Papas fritas de bolsa
La gran mayoría de las papas fritas de bolsa tienen colorantes derivados del petróleo, almidones, conservadores y grasa saturada. Además, una porción de apenas 50 gramos de papas fritas proporciona el 32% del valor diario recomendado de sodio.
Por si fuera poco, las papas fritas también contienen glutamato monosódico, un compuesto que potencia el sabor y te dejará con ganas de comer más y más.
Barritas de granola
Las barritas de granola sobreexplotan la fama que tienen de ser saludables. La verdad es que muchas de ellas pueden tener ingredientes que, lejos de mantenerte en forma, podrían incluso ocasionar problemas a tu salud.
Este producto puede ser muy alto en azúcares refinados, y además de eso, pocas veces incluye cantidades significativas de fruta. Las barritas son uno más de esos alimentos que, mientras menos ingredientes contengan, más posibilidades hay de que sean saludables.
Agua mineral
El agua mineral no contiene azúcar, por lo tanto aparenta ser mejor opción que otras bebidas gasificadas. Sin embargo, algunos de los minerales presentes en este producto pueden generar problemas de salud si se consumen en exceso.
El sulfato, por ejemplo, puede causar deshidratación y diarrea. El calcio, por su parte, puede llegar a ocasionar cálculos renales. La mejor opción a la hora de beber agua mineral es, sin lugar a dudas, hacerlo con moderación.
Huevo de chocolate
Un chocolate con un juguete. ¿Qué más podría pedir un niño? Lamentablemente, los huevos sorpresa están lejos de ser una buena adición a la dieta diaria de los más pequeños: la mitad del peso de la golosina es únicamente azúcar.
Además de que su contenido nutricional deja mucho que desear, ha habido casos en que niños pequeños se han ahogado con los juguetes que vienen dentro del chocolate. De hecho, este producto es ilegal en los Estados Unidos por esa misma razón.
Espinacas
Puede ser difícil de creer, pero también las espinacas pueden ser dañinas para la salud. Y es que a pesar de su alto valor nutrimental, estas hojas suelen estar bañadas en pesticidas. Por si esto fuera poco, también contienen grandes concentraciones de nitratos.
Si bien para los adultos los nitratos no representan ningún problema, si los bebés los consumen en exceso pueden tener dificultades para transportar oxígeno en su sangre, lo cual puede conducir a graves problemas de salud.
Pollo frito
¿Por dónde empezar a hablar del pollo frito? El simple hecho de que esté bañado en aceite lo convierte inmediatamente en algo que debe comerse con moderación. Pero además de eso, este manjar también está hecho con mucha harina.
El pollo frito suele ser bastante alto en calorías, lo cual puede llevar a problemas como el sobrepeso, diabetes, y enfermedades del corazón. Así que, si quieres comer pollo, quizás sea mejor opción cocinarlo a la plancha.
Hamburguesas envasadas
Las hamburguesas que vienen previamente envasadas o empaquetadas suelen ser más baratas. Esto se debe a que están hechas con carne de dudosa procedencia, lo cual le permite a las compañías ahorrar en los costos de producción.
De hecho, muchos empaques indican que el contenido de las hamburguesas es “carne” sólo hasta cierto porcentaje. El resto puede ser una variedad de cosas, desde soya hasta pellejos. Esta última parte, por supuesto, no suele decirse en las etiquetas.
Papas
Al igual que otros vegetales, las papas pueden estar contaminadas con pesticidas que son peligrosos para el consumo humano. Pero este no es el único peligro asociado al tubérculo. Quizás hayas notado que cuando las papas están viejas comienzan a ponerse verdes.
Esto significa que han generado una gran cantidad de glucoalcaloides, que pueden causar intoxicación alimenticia de moderada a severa. Si una papa se ha puesto verde, lo mejor es no comerla.
Embutido
Los embutidos son muy versátiles y pueden comerse y cocinarse en una gran variedad de presentaciones. Sin embargo, no son una gran opción si deseas llevar una dieta saludable. Su principal problema es la gran cantidad de grasas saturadas que tienen.
Por si fuera poco, todos los embutidos tienen cantidades alarmantes de sodio y nitratos, que son cancerígenos. De consumirse en exceso, este producto puede contribuir al desarrollo del sobrepeso, la obesidad, e incluso ocasionar ataques cardíacos y accidentes cerebro-vasculares.
Hamburguesas
Las hamburguesas son probablemente la comida rápida más popular que existe. Y mucho se ha hablado de que contribuyen al aumento de peso. Sin embargo, los peligros a la salud que vienen con comer este platillo van mucho más allá de los kilos de más.
Las hamburguesas en los restaurantes de comida rápida están hechas con grandes cantidades de grasa saturada, azúcar y sodio. Esto puede terminar afectando tu sistema circulatorio, nervioso y digestivo. Además, los ingredientes usados en su elaboración suman muchas calorías, aportando muy pocos nutrientes.
Leche
Si lo piensas con detenimiento, hay algunas cosas desconcertantes en el consumo de leche. En primer lugar está que los humanos somos la única especie que consume leche aún cuando ha terminado de crecer. Además de eso, también somos de las únicas que se alimentan de la leche de animales de otra especie.
Por si fuera poco, algunas de las hormonas que pueden encontrarse en esta bebida se han asociado con el desarrollo de cáncer de pecho y de próstata. Eso sí, indudablemente, la leche es alta en proteínas y calcio, que beneficia a los huesos.
Bebidas energizantes
Hay personas que se apoyan de bebidas energizantes para cumplir con todas las tareas del hogar y del trabajo. Si tú eres una de ellas, quizás debas reconsiderar el hábito, ya que estos productos hacen más mal que bien en tu organismo. Las bebidas energizantes suelen contener cafeína, taurina, y azúcares.
Todos estos ingredientes son estimulantes que pueden causar dolor de cabeza, náuseas, mareos o diarrea. Si se consumen en exceso, la situación es aún peor, ya que pueden causar alteraciones en el ritmo cardíaco, en la presión arterial, y otros problemas como ansiedad e incluso adicción.
Frutas deshidratadas
La fruta deshidratada puede ser engañosa. Es verdad que tiene nutrientes similares a los de la fruta fresca, sin embargo, la deshidratación puede acabar con algunos de ellos. La vitamina C, por ejemplo, es muy sensible al calor y la oxidación, y por lo tanto suele perderse en el proceso.
Además de eso, la deshidratación reduce el peso y el tamaño de las frutas, y por eso es fácil comer de más si te descuidas. La fruta deshidratada puede ser una gran botana, pero conviene estar informado sobre su valor nutricional, y verificar en la etiqueta que no tenga azúcares añadidos.
Refrescos light
Mucho se ha hablado de las alarmantes cantidades de azúcar que tienen los refrescos. Es por eso que, a primera vista, los refrescos light pueden parecer una buena alternativa, ya que suelen presumir que no contienen ni azúcar ni calorías. Sin embargo, esto no los convierte en bebidas saludables.
El consumo cotidiano de refrescos light se ha asociado con afecciones como el síndrome metabólico, y, por si fuera poco, también aumenta el riesgo de padecer apoplejía o demencia. Además, estudios han demostrado que los edulcorantes, al igual que el azúcar, también pueden provocar obesidad y diabetes.
Sal
Seguramente has escuchado que, para llevar una dieta saludable es importante cuidar nuestro consumo de sal. Pero, ¿sabes exactamente por qué? Hay muchas razones, pero la primera es que comer sal en exceso provocará que retengas líquidos, lo cual significa más trabajo para el corazón y los vasos sanguíneos.
La sal aumenta la presión arterial, y puede conducir a problemas severos como ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares, e insuficiencia cardíaca y renal. Además, la sal es peligrosa porque genera una respuesta placentera en nuestro cuerpo, lo cual la hace altamente adictiva.
Peras
Las peras son frutas muy saludables. Sin embargo, debido a la manera en que se cultivan, pueden estar llenas de pesticidas que son muy dañinos para el cuerpo humano. Uno de estos pesticidas, conocido como EDC, puede causar trastornos del sueño, afectar el apetito, e incluso influir en los procesos reproductivos.
Y tristemente, la pera es una de las 12 frutas más contaminadas, de acuerdo con una lista elaborada por la organización estadounidense Environmental Working Group (grupo de trabajo ambiental). Así que, si esta jugosa fruta es de tus preferidas, no olvides lavarlas bien, o incluso desinfectarlas antes de comerlas.
Pizzas
Probablemente la pizza te ha sacado de apuros en más de una ocasión. Es un alimento que puedes encontrar en muchos restaurantes de comida rápida e incluso congelado en el supermercado. Por eso puede ser muy práctico cuando no tienes tiempo de cocinar. ¿Pero vale la pena comerla si consideramos los daños que puede provocar a la salud?
La pizza es una combinación de alimentos potencialmente dañinos para el cuerpo: el queso, que es muy alto en grasas saturadas, los embutidos, que tienen grandes cantidades de sodio, y el pan y la salsa, hechos con mucha azúcar.
Pescado frito
Alguna vez habrás leído o escuchado que el pescado es una de las carnes más saludables que pueden consumirse. Si bien es cierto, la manera en la que el pescado se cocina es muy importante a la hora de determinar qué tan bueno es para nuestra salud.
El pescado frito nos proporciona cantidades innecesarias y poco saludables de grasas saturadas, pero eso no es todo. El hecho mismo de freírlo le hace perder vitaminas y minerales que nos proporcionará si, en vez de echarlo al aceite, lo cocinamos al vapor o a la plancha.
Pasas
Las pasas suelen tener polarizados a los consumidores: algunos las odian, otros las aman. Si bien las pasas tienen la mala fama de colarse en las galletas con chispas de chocolate, también se dice de ellas que pueden mejorar la memoria y aportar ciertos nutrientes a nuestros cuerpos.
La verdad es que este alimento es de origen natural y también es alto en fibra, lo cual puede traer beneficios a la salud. Sin embargo, si vas a consumirlas, debes tomar en cuenta que su contenido de azúcar es alto, y por lo tanto, son altas en calorías.
Mayonesa light
Pesé a lo que podría parecer, la mayonesa light no será tu mejor aliada si deseas perder peso. La razón es simple: a pesar de que la versión light de este producto tiene un 30% menos de grasa que su versión “normal”, sigue siendo altísima en lípidos.
Algunas ensaladas preparadas contienen embutidos o quesos de mala calidad, o cantidades excesivas de aderezos llenos de sal y saborizantes artificiales. Siempre será mejor opción hacer tu propia ensalada, y, de no ser posible, asegúrate de elegir la ensalada empaquetada que tenga los ingredientes menos procesados.
Sopas de sobre
Las sopas de sobre parecen ser una opción fácil y rápida para comer. Muchas de ellas incluso dicen contener ingredientes saludables como pollo y verduras, pero la verdad es que, a la larga, este producto puede generarte más problemas de los que resuelve con su practicidad.
Cada sobrecito de sopa suele contener cantidades muy altas de sodio, lo cual puede ser peligroso para personas con la presión arterial alta. Además, muchas sopas tienen aceite de palma, que puede aumentar el colesterol. A pesar de que este producto puede usarse esporádicamente, no es buena idea que lo consumas con demasiada frecuencia.
Comidas congeladas
Todos hemos deseado terminar un día pesado con una rápida y deliciosa comida congelada. Sin embargo, esta salida fácil podría traerte problemas a la salud a largo plazo, ya que los productos de este tipo suelen estar llenos de ingredientes perjudiciales para nuestro cuerpo.
Desde niveles altísimos de sodio y azúcares hasta cantidades peligrosas de colesterol, esta solución que parece tan práctica podría resultar contraproducente. Si no tienes tiempo para cocinar, recomendamos leer cuidadosamente las etiquetas de la comida congelada y elegir la que tenga mejores valores nutricionales, y no necesariamente la que suene más apetecible.
Ensalada de col
Lo bueno de la ensalada de col es que se puede hacer de varias maneras. Incluye verduras trituradas, lo que significa que está repleta de fibra. El principal problema con la salubridad de esta guarnición es el aderezo con el que se hace.
Una gran cantidad de aderezos cremosos para ensalada de col tienen un alto contenido de grasa y azúcar añadida. La mayonesa es un aderezo común que, a menudo, tiene mucha grasa saturada. El aderezo rico en calorías, según The Daily Meal, puede “romperte” el corazón (literalmente) si comes mucha cantidad con el tiempo. Evita las arterias obstruidas y elige ensalada de col sin mayonesa.
Arroz blanco
El arroz blanco se ha considerado desde hace mucho tiempo un carbohidrato vacío, ya que pierde nutrientes cuando se eliminan el germen y el salvado. A veces, las empresas lo enriquecen con vitaminas B y hierro. Aún así, los especialistas en salud no son grandes admiradores. Al arroz integral solo se le quita la cáscara, por lo que conserva las otras sustancias saludables.
El índice glucémico del arroz blanco es más alto que el del arroz integral. Esto significa que sus carbohidratos se convierten en azúcar en la sangre mucho más rápido que en el caso del arroz integral. De acuerdo a Medical News Today, el alto consumo de arroz blanco puede conducir a un mayor riesgo de diabetes tipo 2, presión arterial alta y colesterol alto.
Pan integral
El pan integral a menudo se considera una opción más saludable que el pan blanco, ya que tiene más nutrientes y fibra. Aunque puede que elijas este pan por su contenido nutricional, cuando miras la parte posterior de la etiqueta, verás que a menudo tiene tantos azúcares y añadidos como el blanco. Además, no siempre tiene tanta fibra.
Si el pan no es completamente integral, tiene harina enriquecida, lo que, a su vez, puede hacer que el nivel de azúcar se dispare. La harina enriquecida significa que los nutrientes del pan han sido despojados. Siempre revisa el reverso de la etiqueta para asegurarte de que estés comprando pan sin este ingrediente negativo.
Damascos secos
La fruta seca a menudo se considera un refrigerio saludable que es más fácil de llevar que la fruta normal. Después de todo, está seca, así que no tienes que preocuparte de que se eche a perder. Los damascos secos son un refrigerio popular, pero ten cuidado de no comer demasiados. Solo una taza de mitades de damasco seco tiene sesenta y nueve gramos de azúcar.