Robo, robo en poblado, encubrimiento y hurto, son algunos de los delitos por los que estos 54 menores fueron detenidos por la Policía de la Ciudad entre el lunes 9 y el viernes 13.
“Como venimos sosteniendo, cometer delitos en la Ciudad tiene consecuencias, y un menor que comete un delito de adulto tiene que ser juzgado como adulto. Detenemos menores una y otra vez y no hay consecuencias. Por eso venimos reclamando la baja de la edad de imputabilidad y que se discuta un nuevo régimen penal juvenil”, explicó el Jefe de Gobierno, Jorge Macri.
Sólo el día lunes fueron detenidos 14 menores en tres hechos delictivos. Uno de ellos ocurrió en el Microcentro porteño, cuando los efectivos detuvieron a dos adolescentes de 13 y 14 años violentando autos para robar pertenencias de su interior. Al momento de la detención, los oficiales constataron que, a la fecha, los menores tenían catorce ingresos a comisarías por robo.
El ministro de Seguridad de la Ciudad, Waldo Wolff, aseguró: “la nueva Ley Penal Juvenil debe contemplar una baja en la edad de imputabilidad y una quita de patria potestad a las familias que promuevan el delito”.
En tanto, en el barrio de Palermo, la Policía de la Ciudad detuvo a diez menores entre 9 y 15 años que, bajo la modalidad piraña, le robaron el celular a un adolescente. Al ser detenidos, tenían entre sus pertenencias tres celulares cuya procedencia no pudo ser justificada y de los cuales uno de ellos era el robado minutos antes. Además, en la calle Defensa al 1300, en el barrio de San Telmo, efectivos de la Policía de la Ciudad detuvieron a cuatro ladrones de entre 26 y 16 años que asaltaron un kiosco a mano armada. De los cuatro delincuentes, dos eran menores de 16 y 17 años.
“La Policía de la Ciudad los detiene y lo va a seguir haciendo. Pero sin una nueva Ley Penal Juvenil, van a seguir saliendo. Tiene que haber un régimen de reinserción real para reencauzar la vida de estos jóvenes que han sido educados para el delito”, aseveró el ministro de Seguridad porteño, Waldo Wolff.
Otro de los hechos ocurrió en Mansilla al 3000 cuando efectivos de la Comisaría Vecinal 2B observaron a dos jóvenes en una moto, quienes al notar su presencia intentaron darse a la fuga pero fueron detenidos en la intersección de la avenida Santa Fe y Azcuénaga, donde se corroboró que la moto carecía de documentos y tenía el cableado de arranque violentado. Los delincuentes, de 14 y 15 años, tenían un amplio prontuario de antecedentes.