El Centro Cultural Recoleta es uno de los edificios más bonitos de la Ciudad de Buenos Aires, Mirarlo desde afuera o recorrerlo desde adentro es siempre un placer. Además, es notable la belleza que guarda el patio de los naranjos como así también las terrazas donde, uno no sólo puede disfrutar de grandes recitales sino también, tomar sol en el verano, o quizás mirar desde arriba cómo transcurren los turistas en Plaza Francia, Plaza Juan XXIII o , más a lo lejos, la facultad de Derecho.
Construido sobre un casco histórico con 300 años de historia, conecta tradición y vanguardia, y es visitado por más de medio millón de personas al año, en su mayoría jóvenes de entre 18 y 35 años. En 1948 este edificio fue declarado monumento histórico nacional a fin de promover su conservación
Hay salas permanentes dedicadas a los adolescentes, al hip-hop, al dibujo, una zona de estudio, un espacio de ocio y recreación, un bar y una tienda de objetos de diseño argentino contemporáneo, además de la Terraza, el Cine, el Laboratorio musical, el Centro de investigación, la Residencia para artistas, la Capilla y las salas de exhibición para artes visuales.
Para visitarlo, pueden acercarse al Junín 1930.