El Quijote de la Mancha también tiene su lugar y es precisamente justo en Pleno centro de la Ciudad de Buenos Aires. Este monumento obra se inauguró en 1980 por la Reina Sofía de España, al celebrarse los 400 años de la segunda fundación de Buenos Aires. Su autor es el escultor español Andrés Tena, según lo que hemos podido investigar. La obra se emplaza en la Avenida 9 de Julio y Avenida de Mayo.
Don Quijote de la Mancha es una novela escrita por el español Miguel de Cervantes Saavedra. Publicada su primera parte con el título de El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha a comienzos de 1605, es una de las obras más destacadas de la literatura española y la literatura universal, y una de las más traducidas. En 1615 apareció su segunda parte con el título de El ingenioso caballero don Quijote de la Mancha.
Don Quijote fue la primera obra genuinamente desmitificadora de la tradición caballeresca y cortés por el tratamiento burlesco que le da. Representa la primera obra literaria que se puede clasificar como novela moderna y también la primera novela polifónica, y ejerció, como tal, un influjo abrumador en toda la narrativa europea posterior.
En 2002, y a petición del Club Noruego del Libro, se realizó una lista con las mejores obras literarias de la historia con las votaciones de 100 grandes escritores de 54 nacionalidades distintas; en
ella aparecían las obras en estricto orden alfabético para que no prevaleciese ninguna obra sobre otra, con la única excepción de Don Quijote, que encabezó la lista por ser considerada «el mejor trabajo literario jamás escrito». Es el libro más publicado y traducido de la historia, solo superado por la Biblia.
Novelista, poeta y dramaturgo español. Se cree que nació el 29 de septiembre de 1547 en Alcalá de Henares y murió el 22 de abril de 1616 en Madrid, pero fue enterrado el 23 de abril y popularmente se conoce esta fecha como la de su muerte. Es considerado la máxima figura de la literatura española. Es universalmente conocido, sobre todo por haber escrito El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha, que muchos críticos han descrito como la primera novela moderna y una de las mejores obras de la literatura universal. Se le ha dado el sobrenombre de Príncipe de los Ingenios.
Miguel de Cervantes nació en Alcalá de Henares en 1547. Fue el cuarto de los siete hijos de un modesto cirujano, Rodrigo de Cervantes, y de Leonor Cortinas.A los dieciocho años tuvo que huir a Italia porque había herido a un hombre; allí entró al servicio del cardenal Acquaviva. Poco después se alistó como soldado y participó heroicamente en la batalla de Lepanto, en 1571; donde fue herido en el pecho y en la mano izquierda, que le quedó anquilosada. Cervantes siempre se mostró orgulloso de haber participado en la batalla de
Lepanto.Continuó unos años como soldado y, en 1575, cuando regresaba a la península junto a su hermano Rodrigo, fueron apresados y llevados cautivos a Argel. Cinco años estuvo prisionero, hasta que en 1580 pudo ser liberado gracias al rescate que aportó su familia y los padres trinitarios. Durante su cautiverio, Cervantes intentó fugarse varias veces, pero nunca lo logró.Cuando en 1580 volvió a la Península tres doce años de ausencia, intentó varios trabajos y solicitó un empleo en <>, que no le fue concedido, Fue una etapa dura para Cervantes, que empezaba a escribir en aquellos años, En 1584 se casó y, entre 1587 y 1600, residió en Sevilla ejerciendo un ingrato y humilde oficio –comisario de abastecimientos-, que le obligaba a recorrer Andalucía requisando alimentos para las expediciones que preparaba Felipe II. La estancia en Sevilla parece ser fundamental en la biografía cervantina, pues tanto los viajes como la cárcel le permitieron conocer todo tipo de gentes que aparecerán como personajes en su obra.Cervantes se transladó a Valladolid en 1604, en busca de mecenas en el entorno de la corte, pues tenía dificultades económicas. Cuando en 1605 publicó la primera parte del Quijote, alcanzó un gran éxito, lo que le permitió publicar en pocos años lo que había ido escribiendo. Sin embargo, a pesar del éxito del Quijote, Cervantes siempre vivió con estrecheces, buscando la protección de algún mecenas entre los nobles, lo que consiguió sólo parcialmente del conde de Lemos, a quien dedicó su última obra, Los trabajos de Persiles y Segismunda.













