Comer un higo es un viaje de ida que no tiene retorno, cuando pensamos en la posibilidad de dejarlo. Por supuesto, su exquisitez es tan notable, que sería imposible abandonar la idea de no seguir comiendo uno tras otro.
Los higos son ricos en azúcares naturales, minerales, fibra soluble, potasio, calcio, magnesio, hierro y cobre y son una fuente de vitaminas antioxidantes A y K que contribuyen a generar importantes beneficios para la salud y el bienestar, así como ayudar al deportista a la recuperación a través de la nutrición.
¿Qué enfermedades cura el higo?
Varios estudios han demostrado la capacidad de los higos de reducir los efectos del estreñimiento, como el dolor y la hinchazón. Además de ello, contribuye a prevenir enfermedades como el cáncer de colon.
¿Qué beneficios tiene el higo para los diabéticos?
El higo es una fruta de bajo índice glucémico, lo que significa que su azúcar se libera gradualmente al torrente sanguíneo, lo que ayuda a equilibrar la insulina , siendo además fuente de fibras solubles, que reducen el índice glucémico de otros alimentos ingeridos en la misma comida.
¿Qué es el líquido blanco de los higos?
Las higueras tienen una savia muy especial llamada coloquialmente la “leche del higo”. Es un líquido espeso, de color blanco, que una vez que se seca parece un tipo de látex muy pegajoso e irritante para la piel del hombre.
¿Cómo se consume el higo para bajar el colesterol?
Colesterol malo: té de hoja de higo para bajarlo y controlar la…
Poner a calentar una taza de agua.
Partir las dos hojas de higo en cuadros.
Al agua, agregar las hojas para preparar una infusión.
Esperar a que hierva durante 15 minutos.
Retirar del fuego y dejar enfriar.
Colar y añadir una cucharada de miel
¿Qué cura la leche de higo?
La leche de la higuera tiene propiedades corrosivas y, bebida con almendras (que hayan estado una o dos horas remojadas en agua), cura cualquier tipo de obstrucción en el cuerpo, suele recomendarse también para ayudar a bajar la menstruación.
Para finalizar, y sin exagerar, el Portal Runnerworld afirma que “El alimento de atletas por excelencia”, así lo definía ya el filósofo griego Platón. Y es que los deportistas de la antigua Grecia durante las competiciones de los Juegos Olímpicos ya introdujeron dentro de sus estrictas dietas este exquisito manjar, pero deshidratados. En este caso, tal y como detalla Nuria Fernández, en los higos secos “los valores nutritivos, incrementan debido a la pérdida de agua, que pasa del 80% en los frescos, al 30% o menos en los secos. Aumenta el contenido en fibra y potasio. Además, aportan magnesio, calcio, fósforo, yodo, zinc, sodio y vitaminas (A, B, C, D y E)”.