«La pandemia afectó en tres cuestiones centrales a la zona gastronómica del bajo porteño: la falta de movimiento laboral en el área, la nula aportación de turismo extranjero y la ausencia de ferias y congresos en la ciudad», expresó a medios radiales el presidente de la AHRCC.
El movimiento en la zona de microcentro y el bajo porteño es casi nula para los hoteles y los restaurantes de Puerto Madero y su zona de influencia. «Allí se ubican muchos establecimientos en graves problemas», agregó Ariel Amoroso.
La AHRCC trabaja para que se brinden soluciones concretas a los problemas del sector. El titular de la Asociación destacó las características particulares de la gastronomía: «Un buen plato es más que una comida. Nuestra gastronomía brinda servicio. Desde quién prepara los alimentos hasta que llega a la mesa; y después intervienen muchas personas en esa cadena de valor.«